19/1/17

Miedo a la soledad, ¿cómo afecta a tus relaciones? [19-1-17]


Miedo a la soledad, ¿cómo afecta a tus relaciones?


En la sociedad en que vivimos está estipulado que los hombres deben vivir en pareja. La condición humana es vivir con otro y formar una familia.

Esta es la imagen que nos han vendido desde tiempos remotos y que todos seguimos a rajatabla cuando llegamos a la edad adulta.

El miedo a la soledad y a enfrentarse a una nueva vida hace que muchas personas mantengan una situación de pareja, conflictiva o simplemente rota por el tiempo o por la situación.

De hecho, todavía hoy son criticados por muchas personas aquellos que eligen vivir en soledad o que se saltan la norma y deciden llevar unas relaciones diferentes (solteros, separados, parejas gays, parejas sin hijos).

Con todo, se entiende que el ser humano recibe de su ambiente unas presiones que le impulsan a cumplir con lo establecido.

Esto se puede convertir en un problema cuando no somos conscientes y no racionalizamos nuestra situación actual sanamente.

Son muchas las personas que llegadas una edad se sienten presionadas por conseguir novio o pareja, y muchas otras las que mantienen parejas que no les interesan por no salirse de la norma y por miedo a la soledad (por suerte cada vez menos).

El miedo a la soledad y a enfrentarse a una nueva vida hace que muchas personas mantengan una situación de pareja, conflictiva o simplemente rota por el tiempo o por la situación, ya no hay cariño ni amor, sin embargo seguimos la monotonía del día a día sin plantearnos otra opción.

También entra en juego aquí la dependencia que ha surgido de esa persona, ya sea una dependencia material o emocional, a menudo las personas no se separa por problemas económicos, o por los hijos o porque creen que no podrá vivir sin el otro, se siente inútil para llevar una vida en solitario.

De tal manera que ante posibles problemas corre un “espeso velo” que le impide ver la realidad y seguir en su rol de familia feliz.

Esta persona se está engañando a sí misma con excusas, defendiendo a la otra parte, buscando solo lo positivo de estar juntos, etc. El hecho de mantener la relación es por un beneficio secundario que se recibe día a día y que refuerzo el seguir en la misma situación, este beneficio puede ser económico, o compañía, tener cosas que hacer, etc. Dentro de esta dinámica también participan a menudo, el “aguantar todo”, el “positivizar en exceso la situación”, el “no dar importancia a ciertas cosas”.

Todo esto ayuda a camuflar la realidad y a vivir en un mundo de fantasía que no existe. ¿Porqué tengo que aguantar?

Para solucionar esta situación será primordial empezar por flexibilizar esas reglas rígidas de las que hablé al principio y que obligan a la persona a mantener su situación, son frases como “tienes que aguantar por tus hijos”, “la mujer debe estar con su marido”,”adonde vas a ir sola/o”, etc. Por supuesto será difícil cambiar eso en los demás pero no tanto en nosotros mismos.

Podemos flexibilizar estar normas sociales, ¿Por qué debo estar con mi marido pase lo que pase? ¿Dónde está escrito? ¿Quién lo dice? ¿Hay alguna ley que me impida separarme? ¿Porqué tengo que aguantar? La respuesta a todas estas preguntas es NO, entonces por qué no cambiar.

Otro punto importante en este proceso será el de positivizar la idea de soledad, no todo es malo en la vida de soltero, de hecho muchos casados la echan de menos porque les permitía unas cosas que al estar casados no pueden hacer.

Se puede disfrutar de estar solo, y de hecho las personas que eligen esta opción, están muy contentos de haberla elegido.

Desde luego, lo más positivo de estar solo es la independencia, poder hacer lo que quiero, cuándo quiero y con quién quiero, sin obligaciones adquiridas de antemano.

Plantéate objetivos pequeños día a día sin pensar en lo que te gustaría conseguir al final de todo el proceso, así obtendrás gratificaciones más rápidas.

El miedo es difícil de superar, pero una vez tomada la decisión, todo será un proceso lento y con logros pequeños que poco a poco encauzarán tu vida hacia un momento más pleno y gratificante.

Sólo tienes que coger fuerzas y comenzar desde cero, poco a poco y sin prisa. Plantéate objetivos pequeños día a día sin pensar en lo que te gustaría conseguir al final de todo el proceso, así obtendrás gratificaciones más rápidas y cada día por los logros conseguidos y no focalizarás tu atención en lo que todavía te queda por hacer.

Piensa que todo objetivo conlleva un trabajo hasta conseguirlo, las cosas no vienen solas, tendrás que mantenerte firme sin perder tu objetivo de vista ya que sólo tú serás el responsable de llegar a buen puerto.

Soluciona los problemas día a día y no dejes ningún cabo suelto, recuerda que puede aparecer en el futuro y estropear todo lo conseguido.

La vida en solitario aporta muchas cosas buenas: Encuentro conmigo mismo Puedo hacer lo que yo quiero y no lo que esperan de mi Puedo ocuparme de mi casa y mi trabajo y disfrutar de ello Podré organizar mi tiempo como más me apetezca Podré ocupar mi tiempo en hobbies e inquietudes que había dejado de lado Podré dedicarme a conocer gente nueva y a disfrutar de lo que, me puedan aportar Podré iniciar una nueva relación más sana y sincera que la que ante he mantenido durante tanto tiempo Fomentar mi yo interior para saber siempre lo que quiero y no vivir en un mundo de fantasía que no cuadra con la realidad Organizar eventos, fiestas en casa Organizar viajes y salidas de modo independiente Felicitarte todos los días por haber sido capaz de salir de la situación de pareja en la que estabas inmerso Recuperar antiguas amistades Estudiar algo, trabajar si no lo hacía antes, con las cosas buenas y malas que ello conlleva Sentirme útil ayudando a otros,( familiares, amigos), ofreciéndome para trabajos , mudanzas , etc. También así fomento las amistades Positiviza la situación actual y recuerda todo lo malo de la anterior En definitiva: vivir por ti mismo y ser autónomo.

.

1 comentario:

  1. Me encanto porque es muy completo me hizo reflexionar que en el camino de buscar nuestro equilibrio debemos llevar ropa liviana porque la vida es un regalo, una bendición y hay que vivirla con gozo, dando para recibir.... Mi madre siempre decia naciste de mí, pero naciste sólo y desnudo nada te llevaras y deberas aprender a disfrutar de tí mismo para poder compartir con los demás lo bonito y auntentico que hay dentro de tiiiii. Nunca se esta sólo porque uno cuando vive plenamente disfruta de uno mismo.
    Bárbara Pérez Eguren
    barbaraeguren@hot
    ail.com

    ResponderEliminar